martes, 18 de junio de 2013

Todo empezó hace 40 años....

Hoy decidí finalmente relatar aquella noche estrellada y maravillosa, como siempre eran las noches en aquella casa que teníamos en Miches, un pueblo que quedaba cercano a la Bahía de Samaná.

Para empezar a contar mi historia, deberé contar ciertos detalles:

Mis padres y yo vivíamos en Santo Domingo, República Dominicana, pero los fines de semana íbamos siempre a Miches. Mi padre durante su época como Gerente de la Shell, decidió hacerse una finca en ese pueblo, y una casa para ir los fines de semana. Aquella vivienda, la mandó a construir encima de una loma y tomó muchos meses en su construcción, por la dificultad en subir los materiales arriba de aquella loma, a la cual se le hizo una carretera de asfalto, para subir hacia la misma casa. La loma se mandó a cortar su cúspide y encima se construyó al estilo rústico, pero con unas vistas impresionantes a los 4 puntos cardinales. Todos los meses de construcción, de dicha casa, íbamos mis padres y mis hermanas, todos a ver su evolución y de paso comíamos en el pueblo todo tipo de comidas típicas y riquísimas que nunca olvidaré.
También aprovechábamos esos viajes, para coger una yolita, (se llama yola a las embarcaciones sencillas de un motor, que los campesinos solían usar para pescar o llevar algún turista hacia la Bahía de Samaná,  que en aquella época totalmente virgen y desconocida por los hoteleros de hoy día.)

Cuando aquella casa, estuvo construida, era muy normal, ir los fines de semana, para pasarlo allí escuchando música relajante, con aquellas maravillosas vistas a  la parte de sierra, la de montaña y a la Bahía. Y de paso mis padres siempre iban con amistades, muchas de las veces.
Yo tenía 10 años, y mi padre que se había comprado ganado, para su hacienda recién estrenada, y tenía su propio caballo de montar para el campo, llamado “Mantequilla”, al ver mi inquietud y deseos por también montar, ya que desde pequeña lo hacía en las playas de Juan Dolio, con aquellos caballos medio mezcla con burro, que nos prestaban o alquilaban para paseos playeros. Pues me compró una yegua, a la que bautizamos “Penélope”, y esta a los pocos meses tuvo su primer potrillo, otra yegua que bauticé como “Romina”.

Esos fines de semana en Miches nunca los olvidaré por aquellos paseos a caballo con mis yeguas Romina y Penélope, por mis viajes en yola con mis padres, hermanas y amigos a la playa de Samaná, y aquellas aguas cristalinas y maravillosas, y luego llegar a aquella casa, con preciosas vistas y los chinchorros (hamacas) colgados del porche, donde los amigos, y nosotros nos recostábamos a hacer la siesta, cobijados por la brisa fresca de los atardeceres y la música melodiosa que sonaba del aparato de música de mi madre.

Si a todo esto, le agrego lo que ocurrió uno de aquellos fines de semana, puedo asegurar que mi vida cambió radicalmente a partir de ahí.
Siempre desde muy pequeña, en mis viajes a España, me encantaba charlar con mi abuelo paterno. Eduardo, se llamaba, como mi padre. Era un hombre cultísimo y tenía una biblioteca extensísima en libros de historia, geografía, autobiografías, temas esotéricos, temas de UFO´s, y principalmente enciclopedias de todo tipo, manuscritos antiguos, libros de la guerra civil española, de Franco y de ingeniería industrial, porque mi abuelo era de carrera militar,  era un General retirado de la época franquista, pero además Ingeniero Industrial, carrera que mi padre también siguió. Mi abuelo no jugaba apenas conmigo, pero se dedicaba a cultivar sus nietos, en mi vio algo especial,  debo pensar eso, porque a mí me hablaba mucho de otros mundos, de ovnis, y de extraterrestres. Yo fascinada e intrigadísima, quería que me contará todas las historias posibles. Tanto entusiasmo vio en mí, que esas Navidades recibí de España, un telescopio, mandado especialmente para su nieta Patricia!!! Que ilusión me hizo recibir aquel artefacto. Tanto que no lo saqué de su caja, hasta el día que lo llevé a Miches, ya que a mí me parecía mejor estrenarlo allí, en medio del monte, donde había millones de estrellas a la vista!!!

Mientras pasaban las semanas, y cada fin de semana, en el Periódico El Listín Diario, si no me equivoco, creo era ese el periódico, traía siempre casos raros, en una de sus secciones que tenían que ver con avistamientos de ovnis, extraterrestres, y otros casos que ya no viene al caso mencionar. Siempre me leía esa sección, fascinada por la lectura de todo eso, que yo creía era definitivamente fascinante. Además mi abuelo siempre me había dicho que “no estábamos solos, y que habían otras vidas desconocidas, que nos solían visitar”.

Uno de los fines de semana, que fuimos a Miches, estábamos mis padres, unos amigos, si no me equivoco o mi memoria no falla, creo era Tirso Ramos, Mari Tere Ramos, y los otros no recuerdo quienes eran, se ha esfumado en mi memoria. Eran las 8:00 de la noche, y yo estaba mirando al firmamento con mi telescopio, las diminutas estrellas. Me encantaba mirarlas como brillaban, y  algunas eran más grandes que otras.
Hubo un momento, que giré mi telescopio hacia la preciosa Bahía de Samaná, y fue entonces que aprecié entre las palmeras un fulgor impresionante, muy brillante, entre tonos rojos y amarillos. En ese momento, pensé que habría algún fuego en la bahía, ni me preocupé mucho, la verdad yo estaba en lo mío….en mirar las hermosas estrellas! Pero pasados unos 15 minutos, quizás poco más, pero no más de 20, de eso si estoy segura, por la hora que era, volví a mirar dirección hacia la Bahía y para mi sorpresa aquello tan brillante y grande entre las palmeras, que a mi en un principio me había parecido ..un fuego inmenso…ya no estaba.!

Estamos hablando de mediados de los años 1970, y en ese pueblo no habían bomberos, era un pueblo de pescadores, de lo más humilde, pequeño y solo había un Hotelito, que más bien parecía una pensión. Inmediatamente, me intrigó, la tan rápida desaparición del “fuego”-
Siempre fui una niña muy despierta, y lo que más, muy curiosa. O sea que esto, ya había despertado mi “total curiosidad” . Seguí mirando un rato las estrellas, pero mi cabecita, seguía pensando en aquello…..Y no pasó mucho rato que giré mi telescopio nuevamente a buscar aquella “luminosidad extraña”, enfoqué mejor mi telescopio y me dediqué a buscar bien, por toda la bahía, y de repente encontré una masa enorme, luminosa en el borde la playa.  Entonces, pensé “¿Cómo de repente ha aparecido este barco inmenso, aquí a orillas de la playa? Antes no lo vi….que raro….”
No se veía la forma, exacta, porque estaba entre la arena, y el agua, pero si se veía que era luminoso y grande dimensiones.
Seguí un buen rato mirando mis estrellas, quería buscar alguna de esas constelaciones que en el Colegio me hablaban, como la Osa Mayor, y me encantaba ver aquellos dibujos de estrellas pintados en el horizonte nocturno.!!! De repente, volví a acordarme de aquel objeto luminoso en la orilla de la playa…y dirigí mi telescopio en su búsqueda. Pero ya no estaba!
Como que ya no estaba? Era enorme!!! No habían pasado ni 5 minutos!!! Como se había movilizado con tanta rapidez? Si yo pensaba que era un barco encallado en la arena!!! Esto era muy raro!!!! No podía ser…me puse a buscar más…y a unos metros de la orilla en el mismo mar, ahí estaba….suspendido, encima del mar a otros tantos metros, que no sabría decir, pero deduzco que serían unos 10 metros aproximadamente, por lo que mi mente recuerda de aquella noche.
Enfoqué decidida mi telescopio, el enfoque en esto era muy necesario, y yo no iba a dejar esto pasar por alto!!! Y ahí, lo vi, como tantas veces lo había visto en el periódico dominical, aquello era cierto!!!! Era un OVNI!!! Su color, era plata lumínico, muy intenso y así permaneció durante media hora aproximadamente. Yo no tardé en llamar al resto de personas que estaban en mi casa de Miches, mis padres, sus amigos….

Recuerdo como tiré el telescopio y como loca entré en la casa, estaban todos charlando con sus copas y tragos en la mano. Yo toda alborotada les gritaba “Lo he visto!!!, estoy viéndolo!” , mis padres extrañados me preguntaban que era lo que estaba viendo y yo entre gritos y acelerada “un OVNI…HAY UN OVNI EN LA PLAYA , LO ESTOY VIENDO CON MI TELESCOPIO”!!!!! algunos escépticos se rieron en mi cara…y yo les gritaba “No estoy loca, vengan y mírenlo, yo lo estoy viendo y si lo veo yo, lo ven Uds., y no se reirán de mi” Me enojo bastante que me tomarán en broma. Yo me consideraba ya una Adulta! Y muy inteligente, para que esos adultos se rieran así de mí.
Total, que conseguí, no sé cómo…que todos, hasta aquellos amigos escépticos de mis padres salieran afuera y uno por uno cogieran el telescopio hacia la dirección donde estaba la Bahía de Semana. Todos, incluidos mis padres, lo vieron. Recuerdo, que comenzaron algunos a mencionar el Triángulo de las Bermudas, y que no les extrañaba esta aparición, justo ahí donde termina uno de los vértices famosos de ese Triángulo tan mencionado.
Seguimos mirando, era una noche como muchas otras, estrellada, ya que Miches tenia las noches más bonitas, siempre llena de estrellas de todos los tamaños. Aquello, definitivamente era un Ovni, no había duda, es más recuerdo los escépticos tuvieron que “callarse” luego de mirar por el telescopio y fruncieron el ceño…Ya no dijeron “que niña más tonta, o que niña más fantasiosa”. Yo me sentía dichosa, estábamos viendo algo que pocas personas en este mundo habrán visto! Y lo estábamos compartiendo!!

Ahora si yo estaba segura, que aquellas historias increíbles de misteriosos avistamientos de Ovnis, que salían en el periódico dominical, no eran inventos de otras personas, No, no lo eran. Y por alguna razón tuve la suerte de yo poder verlo. Eso nunca lo olvidaré, en lo que me resta de vida.
Durante horas, todos absolutamente todos, estuvimos pendiente del OVNI, y lo llamo OVNI, porque es lo que vimos todos. Para aclarar la idea de lo que vimos:
Tenía forma de platillo, color platino luminoso, muy luminoso y conforme pasó una hora, esa luminosidad empezó a proyectar, otros colores, y eso si fue extraño, porque el aparato, durante la primera hora, era solo color platino, no tenía a la vista ningún tipo de foco. Pero,  no puedo decir con certeza, ni los acompañantes que lo vieron conmigo, si era por culpa de mi telescopio, que no enfocaba a la máxima potencia.
Duró aproximadamente suspendido en el aire desde las 8:00 hasta las 12:00 de la medianoche, o sea unas 4 horas. Y en ese intervalo hizo unos movimientos extraños. Se movilizaba hacia arriba en movimiento de cruz. O sea, subía un poco, luego derecha, y luego izquierda, a veces bajaba de nuevo un poco. Y volvía a subir, pero siempre haciendo estos movimientos. Nos parecía a todos muy extraño esta manera de movilidad, pero luego llegamos a la conclusión, que este OVNI, estaba observando, por eso no se iban.
Vimos durante 4 horas, su alejamiento hacia arriba, y cuando ya eran las 12 de la medianoche, fue cuando repentinamente todos vimos como desapareció ante nuestros ojos. Recuerdo como hizo un movimiento perpendicular hacia arriba y subió a una velocidad vertiginosa y desapareció.
Esa noche apenas dormí. Todos quedamos que al día siguiente iríamos a la Bahía de Samaná, como siempre solíamos ir a la playa aquella solitaria, y preciosa, llena de cocoteros y una arena blanca. En la playa de Miches nunca íbamos, porque estaba llena de desperdicios, la gente del pueblo no cuidaba su playa y por eso siempre cogíamos nuestra yola y cruzábamos hacia aquella paradisiaca playa sin habitantes, ni hoteles ni nada.

Al día siguiente temprano, ya estábamos todos en la playa. Mis padres los vi inspeccionando un poco el terreno, pero no vieron huellas de nada. A mí me daba lo mismo si  habían o no huellas y me dispuse a dejarles un mensaje.
Me sentía una Robinson Crusoe, con ganas de descubrir algo más. Y me dispuse a escribir un mensaje en la playa para los “extraterrestres”. Mi padre al verme me dijo “hija ahí el agua del mar, cuando venga la crecida, borrará tu mensaje, escríbelo más arriba”. Total que me puse manos a la obra y con un palo que encontré entre medio de los matorrales, comencé a escribir en letras inmensas “Yo les vi anoche, en su nave, bienvenidos, soy Patricia”
Pasamos el día en la playa y en la tarde nos fuimos todos. Me despedí de mi estupendo mensaje, y recuerdo como les dije a mis padres “Ellos lo leerán”. Contenta y feliz me iba, porque de alguna manera yo creía que me había comunicado con los tripulantes de aquel OVNI.
Nos fuimos en nuestra yola, y ya en la casa de Miches, recogimos todos nuestras cosas y nos dirigimos a nuestros respectivos carros, de regreso a la ciudad, a Santo Domingo.




Que paso después? Pues aquí viene la parte más interesante. Difícil de creer, que ni yo misma analizándola con lógica sé si tuvo realmente algo que ver. Nunca lo sabré.
A la semana siguiente,  un lunes, recuerdo bien, ya que ese fin de semana no habíamos ido a Miches, a mi regreso del colegio, mi madre me dice- “Te tengo una noticia Patricia hija!, creo que tus extraterrestres si vieron tu mensaje”
Yo entusiasmada grite como niña al fin…”LO SABIAAAAAA” , mi madre me dijo que me calmara, que podía ser casualidad, pero que ella creía que no lo era, esa era la parte “positiva”. Y me dice “Hoy me llamó la hermana de María Cristina, su hermana no es amiga mía, apenas la conozco de haberla visto una vez, pero esta mañana a las 9 de la mañana me llamo, a mí me extraño , ya que con ella no tengo trato, sino con María Cristina, que es muy amiga de Mari Tere Ramos. Ambas hermanas tienen dotes de videncia (yo ya sabía de lo de la videncia de María Cristina) porque una vez de visita en mi casa esa señora cayó  en un trance frente a mí, y vi como hablaba en una lengua extraña. Su tono de voz cambió y hasta su manera de expresarse. Nunca a pesar de mi corta edad, me supuso eso un trauma, ya que para mí todo lo extraño tendría su explicación. María Cristina fue una mujer de mucha fe a Dios, la conocíamos todos, pero tenía estos trances, donde le hablaban y le comunicaban “cosas”. Ella cuando falleció apareció levitando a medio metro de altura encima de su cama. Falleció relativamente joven y no me extraña, ya que estos trances a los que ella se veía sometida, le cansaban y fueron menguando su salud.
Volviendo al tema, a lo que iba contando, la hermana de María Cristina, llamó a mi madre y le dijo “Marisa, perdona que te llame tan temprano, te he despertado? Soy la hermana de María Cristina, excúsame si te he despertado….” Mi madre le dijo, que no importaba y empezaron a charlar.
Ella le dijo a mi madre que la noche anterior mientras dormía, cayó en un sueño profundo, y vio una inmensa playa en su sueño, de repente aparecía una niña , y a la niña se le acercó un hombre pequeño de altura, aproximadamente la misma altura de la niña, pero lo peculiar del hombre era su indumentaria, ya que parecía un astronauta. Pero, se dio cuenta que no lo era, cuando este hombrecito, comenzó a hablarle a la niña en otro idioma, ella en ese momento se dio cuenta estaba en medio de uno de sus “trances” y medio dormida, cogió lápiz y papel, “el mensaje empezaba diciendo que era un mensaje de paz, para el mundo, pero con ciertos avisos que debían tomar en cuenta…..”, mi madre le preguntó cómo sabía que era eso lo que le decía ese extraño hombre, si hablaba en otro idioma. Y ella le contestó “porque al estar en trance, yo puedo entender cualquier idioma, pero no pude seguir escribiendo, porque mi hijo de 6 meses empezó a llorar, e inmediatamente me desperté del todo para atenderlo”. Y ya no supe más.

Mi madre extrañada le comentó “Sabes lo raro de todo esto que me cuentas? Que estuvimos hace una semana en Miches…..” le contó todo lo que había pasado, entonces ella le contestó “pues no le veo nada raro, yo sentí la necesidad de llamarte a ti, a mí también me pareció extraño, porque solo te conozco por haberte visto una vez con mi hermana, pero sabía, que por alguna razón tenía que contártelo a ti” En eso terminó aquella conversación.

Siempre me pareció algo increíble, ya que creo en vidas en otros mundos, y no dudo que nos visitan, ya que lo vi con mis propios ojos, pero hay cosas que se escapan a mi entendimiento como los trances espirituales o mediumnicos  (llámese como sea).
Pero si miramos más allá, Julio Verne fue una especie de vidente, y el que redactó el libro Titano, y otras personas que no sabemos de sus vidas algunos videntes, otros médiums. Lo malo de todo esto, es que hay muchos haciéndose pasar por videntes y médiums, y ganando dinero a costa de personas ingenuas e inocentes y los verdaderos no lo hacen por dinero, sino que en la privacidad de su casa sufren videncias o trances de este tipo. Como estas hermanas, las cuales no pedían pasar por estos trances mediumnicos, les venían solos, no cobraban por nada de esto, porque al revés, tenían ese don, lo admitían en su vida, pero no lo usaban para hacer dinero, ya que muchas veces escuche a María Cristina, que esto la desgastaba “energéticamente” y se enfermaba. Ella incluso le dijo a Mari Tere y a mi madre que sabía la fecha de su muerte, y no se equivocó, ya que falleció exactamente el mismo día y mes que había pronosticado.
Pero este tema, prefiero no tocarlo, porque escapa como dije antes mi poder de entendimiento, y como no podría ni defenderlo, no entraré en él. Solo sé que esa mujer llamó a mi madre y le comunicó aquello que en sueños había visto.


A partir de ahí, como dije antes, mi vida cambió totalmente. Y nunca dejé de leer sobre todo lo inexplicable, tanto sobre los temas de la Atlántida, las Pirámides Keops, Kefren y Micerino, los misterios de los trazados que parecen un aeropuerto en Perú, las pirámides de Perú, la Isla de Pascua y los OVNIS.

También me dediqué a interesarme por temas esotéricos, y a pesar del fraude comercial que existe entre los payasos videntes y tarotistas que circulan por la TV, la Red y demás sitios con fines de engañar a mentes inocentes, yo sé por otro lado que si existen personas con capacidades muy altas, para hacer viajes astrales y hacer de médiums. Pero vuelvo y repito, para mí ese lado, tiene un lado peligroso, el cual ni me asomo, ni me atrevo a asomarme. Es el lado oculto del espiritismo  y soy muy creyente y me asusto como es normal.
Por ese interés en los viajes astrales, compré un libro sobre este tema, y me interesé mucho en los libros del autor de Juan Sebastián Gaviota, Richard Bach; este escritor ha sacado varios libros relacionados al tema de viajes astrales.
No sé, pero durante muchos años leía y compraba libros relacionados con estos temas, fue como una ráfaga de interés, que luego por un hecho aislado, abandoné abruptamente todo interés relacionado con esos temas. De hecho creo que estos hechos aislados tienen algo que ver con el avistamiento de aquel OVNI siendo niña.

A comienzos de los años 1990, yo vivía sola en un piso que mis padres me habían dejado, ya que una vez que me gradué de Diseño en los USA, decidí mudarme a Barcelona, España. Mis padres se quedaron en los USA, y yo mientras vivía en el piso de mis padres en Barcelona, el cual tenía pocos muebles, y yo fui decorando a mi gusto y según mis posibilidades. Recuerdo perfectamente era un miércoles, hablé con mi tía por teléfono, una vez que comía y antes de irme a hacer mi siesta (típico en España), siempre la llamaba, era como mi segunda madre. Ella entonces me recordó que a las 8:00 de la noche, salía el famoso concurso de Miss Universo, lo televisaba  Telecinco. Recuerdo como le dije “no me lo perderé ni loca”.
A las 8:00 en punto desperté, medio adormilada corrí a poner la TV, y puse Tele 5, estaban dando unos comerciales, me esperé y de repente anunciaron una película de vaqueros….mosqueada, cambié los canales, pero no me aparecía el Miss Universo. Llamé a mi tía, y le dije “Tía, hoy no es Miss Universo, lo busqué en Tele 5 y están dando una película de vaqueros y en los otros canales tampoco….ya llevo media hora buscando y nada”. Mi tía sorprendida me dijo “Miss Universo??? De que me hablas??? Eso ya pasó, fue el miércoles pasado. “
Cuando mi tía me dijo eso, me quedé en shock, me sentía en medio de una broma…. Le repliqué “Tía, hoy es miércoles, de que me hablas?” Mi tía muy seria dijo “No, Patricia, hoy no es miércoles, te pasa algo? Como va a ser miércoles….hoy es Sábado!”
Ya estaba muy mosqueada y hasta pensaba que mi tía me estaba gastando una broma de mal gusto y le dije “No me hagas bromas tía, que no estoy para bromas. Eso no puede ser!” y recuerdo como hoy que me dijo “anda nena, si no me crees, vete al estanco abajo que todavía está abierto y venden periódicos”. Colgué inmediatamente el teléfono, bajé por las escaleras, (ni siquiera espere al ascensor). Mi corazón iba a mil por hora, acelerado…..Llegué al estanco y miré aquel periódico de La Vanguardia, que se leía perfectamente Sábado!!!!
Lo leí varias veces, mientras el vendedor de periódicos me preguntaba “lo quiere?”, le conteste de mala manera “No, gracias” y subí (esta vez por el ascensor) a mi piso y llamé a mi tía para disculparme. Intenté razonar que había ocurrido el miércoles, jueves, viernes y sábado,….tres días entremedio en el limbo, por así decirlo. Intente pensar, recordar…no venían recuerdos. Llame a mis amistades, todos coincidían en que me habían llamado varias veces y nunca cogía el teléfono. Mi tía también me había llamado, pero pensó que las veces que me llamó no me encontraba en la casa. No tuve ninguna sensación esos días? No escuche el teléfono  que por cierto se encontraba en la mesita de noche , al lado de mi cama? No tuve hambre, no tuve sed, no tuve ganas de ir al baño? Que pasó en esos días? Donde estuve? Porque pasó esto? Miles de preguntas a través de los años me he preguntado sobre ese episodio y nunca encontré una respuesta. Incluso a mi tío Neurólogo le cuestioné y la única respuesta lógica que él me da, es que haya entrado en un “coma”. Pero porque iba a entrar yo en un “coma”? estaba sana, comía bien, no había tenido ningún accidente….Esa no pudo ser la razón!
No me quedé satisfecha con esa respuesta, que para un científico puede ser muy lógica, para mí no lo fue. Y menos cuando me pasó el siguiente episodio, al mes siguiente:




Iba hacia mi trabajo, yo trabajaba de Encargada en una Peletería, también modelaba en el Show room y vendía luego las prendas. Además de cobrar. Ese día, estando en el trabajo empecé a ver triplicado todo, parecía como si la persona que tenía enfrente hablándome y preguntándome cosas, fueran trillizas. Pero interponiéndose una con la otra y borrosa. Los colores no eran definidos, estaban también borrosos, me empecé a asustar, pero no quería decirle a mi jefe lo que me estaba ocurriendo,  yo sabía que esto “no era normal”. Durante el día entero, fue una agonía, cada vez que iba a coger algo de la mesa para cobrar, la factura etc…era “tanteando con mi mano” disimuladamente, no veía realmente donde estaban las cosas!!! Era horrible, no saber si era a la izquierda, a la derecha o en el centro.!!!!!
Que hacer? Pasaron 3 días con mi vista borrosa y viendo todo triplicado…el autobús recuerdo que no sabía si se paraba frente a mí o más adelante o más hacia atrás, le pedía ayuda a las personas que estaban en la parada, con más vergüenza que otra cosa. El tercer día, ya mi impotencia y mi preocupación eran demasiado fuertes, para dejar el tema así y se lo conté a mi compañera de trabajo. Ella me dijo que fuera inmediatamente a un oculista que me mirara la vista, yo estaba realmente asustada, hasta pensé en un tumor maligno cruzando mi cerebro y dañándome mi vista y demás…..Le dije a mi jefe, que posiblemente no iría al trabajo, porque iba a ir a mi médico para una visita rutinaria. Al despertarme al día siguiente, o sea el 4to día…..mi visión se recuperó como por magia. Veía perfectamente! Que ocurrió? Nunca lo sabré. Fui al oculista, para que mirara mi vista y la tenía perfecta, mejor que la de un niño 20/20. Entonces? Eso y lo que me ocurrió un mes antes, aquellos 3 días de “no existir” y al mes siguiente, 3 días completos con una vista distorsionada? Nunca sabré que paso. Algo tengo claro…..no fue normal y natural. Quizás las personas que no creen en nada, que no creen en Dios, que no creen en extraterrestres, que no creen que hay cosas inexplicables en este mundo , que por mucha vuelta científica intentemos darle, no es la verdad. Creo que tenemos miedo de saber más. Porque hasta yo, que siempre leía muchos libros sobre todos esos temas, dejé de leerlos…miedo? Espanto de saber? Vuelvo y repito, lo que me ocurrió a mí, no fue algo normal. Luego he visitado médicos, no tengo tumores, ni tengo mi vista dañada, no pude tener un “coma”. Eso lo dicen porque cuando no hay explicaciones para algo te dan una científica, pero yo sé, que esa no es la respuesta a las cosas que a mí me pasaron en esa época. 


Espero que las personas que lean esto, no se asusten. Yo me asusté, no lo niego, pero lo he aceptado, como algo que me pasó y que nunca sabré la respuesta, la científica, no me encaja, sé que no es lo que me ocurrió. Sé que muchos negaran la evidencia, que habrán personas que dirán los OVNIS no existen, muy a pesar de que yo lo vi, con mis padres y sus amigos. Yo no intento convencer a nadie, pero si quiero o me gustaría, que no tuviéramos tanto miedo a aceptar que hay cosas que no están en nuestro poder de entender o razonar. Y muchas veces el miedo de no comprender algo, es lo que nos hace negarlo. Un saludo a todos…..espero sus comentarios y Feliz Día!


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